sábado, 19 de enero de 2008

LOS CRÍMENES DE OXFORD

Director: Alex De La Iglesia
Intérpretes: Elijah Wood, John Hurt, Leonor Watling
Web: http://www.clubcultura.com/clubcine/clubcineastas/delaiglesia/oxford/index.htm



Martin (Elijah Word) aterriza en Oxford con un claro objetivo: convencer al profesor Arthur Seldom (John Hurt) de que le dirija su tesis. Pero lo que iba a ser un periodo de estudio, se convierte en una locura repleta de asesinatos y de enigmas matemáticos.

Alex De La Iglesia y su colaborador Jorge Guerricaechevarría toman “prestado” un texto de Guillermo Martínez para construir su primera aventura británica con dos metas bien diferenciadas: una superficial y otra esencial. La superficial, pariente de “La huella”, los filmes de la Hammer y la novelesca de Agatha Christie, funciona a medio gas. El uso constante de elipsis arriesgadas, la sucesión de escenas atropelladas y la mediana implicación del espectador con los enigmas de los protagonistas (en ocasiones, barullos poco interesantes), no ayuda a resaltar los méritos del juego de De La Iglesia. Y esos también se encuentran. Al director vasco nadie le podrá negar que no sepa rodar con muchísima inteligencia (sirva de ejemplo su filmografía y, en este metraje, los planos secuencia o la milimétrica música de Roque Baños), pero parece que lo que falla en la cara juguetona de “Los crímenes de Oxford” es el ensamblaje. Por interesantes que sean las ideas (en el filme hay casi tantas como obsesiones), la sensación final no pasa de estar admirando una obra menor que podría mejorar con una rebaja en su artificio.

Diferente impresión produce “Los crímenes...” en su vertiente más dolorosa. La magnifica constatación artística del azar, quizá la única tangible, mediante una reflexión póstuma que, entre lo falso y lo real, enlaza círculos y quema futuros, reitera la certeza matemática que tenemos unos cuantos sobre Alex De La Iglesia; un realizador al que le faltan casualidades (a veces más, a veces menos) para ser el director más importante del cine español.

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